Ella coge tu mano, y yo muero al verlo, mira tus ojos y tu a los de ella y me siento pequeña ¿por que no me puedes mirar a mi de esa manera? cuando pasas cerca, intento decirte lo que siento, pero todo mi ser se congela y nunca consigo hacerlo, mi lengua se enreda, y las palabras no son capaces de negociar con ella para salir, siento los latidos de mi corazon mas fuerte cada vez que hablas conmigo, pide ayuda, pide ser amado, te veo junto a ella, bailando la cancion lenta de la noche, dejandome de lado porque no ves lo que siento, cada vez que le besas, me rompo, todo mi cuerpo tiembla y pide ser ella, cada parte de mi desea ser ella en todo momento, ella te mira, de una forma bonita, si, pero no de la forma con la que te miraria yo a ti si pudiera, ella hace todo lo que yo se que podria hacer, si el tiempo pudiera pararse, y volver hacia atras...tengo dos palabras que siempre quise decirte, dos palabras, esas, sencillas, las que muero por decirte, cierro los ojos y me imagino contigo, bailando a la luz de la luna, sin ella, sin que ella este en medio, tu, llamandome tarde porque deseas decirme buenas noches y despedirte con un te quiero, como deseo en estos momentos ser ella.
Si todos los caminos llegan a Roma, ¿cómo se sale de Roma?
A veces, pensamos demasiado y sentimos muy poco.
Mi abuelo siempre decía que si alguien quiere seriamente formar parte de tu vida, hará lo imposible por estar en ella, aunque, en cierto modo, perdamos entre pantallas el valor de las miradas, olvidando que cuando alguien nos dedica su tiempo, nos está regalando lo único que no recuperará jamás.
Y es que la vida son momentos, ¿sabes? Que ahora estoy aquí y mañana no lo sé. Y que quería decirte, que si alguna vez quieres algo, quieres algo de verdad, ve por ello y nada más, mirando el miedo de frente y a los ojos, entregándolo todo y dando el alma, sacando al niño que llevas dentro, ese que cree en los imposibles y que daría la luna por tocar una estrella...
Así que no sé qué será de mí mañana, pero este sol siempre va a ser el mismo que el tuyo, que los amigos son la familia que elegimos y que yo te elijo a ti, te elijo a ti por ser dueño de las arrugas que tendré en los labios de vieja, que apuesto fuerte por estos años a tu lado, por las noches en vela, las fiestas, las risas, los secretos y los amores del pasado. Tus abrazos, así por que sí, sin venir a cuento, ni tener que celebrar algo.
Y es que en este tiempo me he dado cuenta que los pequeños detalles son los que hacen las grandes cosas. Y que tú has hecho infinito mi límite, y así te doy las gracias por ser la única persona capaz de hacerme llorar riendo, por aparecer en mi vida con esa sonrisa loca, con ese brillo en los ojos capaz de pelearse contra un millón de tsunamis...
Así que no... no sé dónde estaremos mañana, no sé dónde estaremos dentro de diez años, ni cómo se sale de Roma, no te puedo asegurar nada. Pero te prometo, que pase lo que pase, estés donde estés, voy a acordarme de ti toda la vida, por eso, mi luna va a estar siempre contigo, porque tú me enseñaste a vivir cada día como el primer día del resto de mi vida y eso, eso no lo voy a olvidar nunca.
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