
No sé qué tienes, pero el roce de tu mano en mi cuerpo hace que me estremezca. Me encanta dejar pasar el tiempo, si es por estar a tu lado. Adoro mirarte a esos ojos que me vuelven loca, y sentir que soy feliz si estoy a tu lado. Te extraño cada segundo que no paso a tu lado. Quiero que me des tu calor día a día. Deseo que no acabe este momento nunca, que el sentimiento de felicidad que siento si estoy a tu lado no se marche. Añoro poder tocar tu pelo, o poder decirte cosas para que te rias. Añoro hacertee reir, aunque sea de mi, lo importante es que te ries, que eres feliz. Te añoro, te necesito, te deseo. te quiero.
No dejaba de pensar en lo que él le había dicho ¿Era verdad lo que decía o sólo lo decía por decir? ¿Se sentía realmente así?
¿Le añoraba, le queria, le necesitaba, le deseaba? No podía creerlo...
-¿En que piensas? -le preguntó el al ver que no hablaba.
-Nada preocupante, tranquilo.
Le besó.
-Dime en qué estabas pensando por favor.
-Estaba recordando tus palabras, solo eso.
-Oh...¿tanto te ha molestado que te dijese la verdad?
-¿Realmente es verdad?
-Sino no lo hubieses oído.
-Ah...
-¿Que te preocupa? dime...
-Simplemente el hecho de que tú sientes algo por mi que no comprendo por que lo sientes. Lo que me preocupa es que me enamore de tí, y que vuelva a sufrir.
-Me ha costado conseguirte....
-No me gusta poner las cosas fáciles.
-Por eso siempre he intentado conseguirte, porque eras como un reto. Te queria, y te quiero... y al ponermelo mas dificil cada dia te quiero mas. Es algo extraño, nunca habia soportado tanto tiempo a nadie como a ti. Eres especial, no se explicarlo.
-Soy invisible a los ojos del resto.
-¿Y que tiene eso de malo?
-Que quizá el dia que me enamore de alguien, sea invisible para el...
-Entonces será que no te merece.
-O que yo no valgo lo bastante.
-Que no te merece.
-No me hagas ganarte a un duelo a cosquillas porque me se tus puntos débiles.
-Mira como tiemblo...
-¿Si? Vas a flipar...
Comenzó a hacerle cosquillas y él no podía parar de reír. Le encantaba verle tan feliz. Ella se distrajo y el aprovechó y le cogió, le besó. Ella, al rozar la mano del muchacho en su cuello, sintió algo extraño. Era una mezcla de electricidad y entusiasmo. Estando con él, todo lo demás dejaba de tener sentido.
Sabía que no estarían eternamente, pues lo eterno no existe. Debía aprovechar cada segundo con él, porque el tiempo...se asaba y no volvía.
-Te quiero.
-Y yo pequeña, y yo.
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